El Elemento de Ken Robinson
Sir Ken Robinson (experto en creatividad, innovación y recursos humanos), es el autor de El Elemento: un libro maravilloso que busca sacar lo mejor de nosotros mismos, comprendiendo nuestro extraordinario potencial de crecimiento y desarrollo.
A través de las páginas encontramos historias reales de personas muy diferentes que descubrieron su Elemento, es decir, eso que les apasiona y les hace perder la noción del tiempo.
“Cuando estás en tu Elemento, tu sentido del tiempo cambia. Si estás haciendo algo que amás, una hora puede parecer 5 minutos, si haces algo que odiás, 5 minutos se sienten como una hora”.
El Elemento es el punto de encuentro entre las aptitudes naturales y las inclinaciones personales.
Según Ken Robinson, todos tenemos talentos naturales, pero la mayoría de nosotros los desconocemos porque tenemos una percepción muy limitada de nuestras propias capacidades. Y para él, la educación es una de las principales razones por las que esto ocurre.
“Hay demasiada gente que nunca conecta con sus verdaderos talentos naturales y, por tanto, no es consciente de lo que en realidad es capaz de hacer. En ese sentido, no saben quiénes son en el fondo”, dice.
Así como hay personas que les apasiona lo que hacen y no pueden imaginarse haciendo otra cosa, hay personas que no disfrutan de lo que hacen y tampoco tienen idea de lo que les gustaría hacer.
Por esa razón, Ken Robinson comparte las historias de Matt Groening (creador de Los Simpson), Paul McCartney (uno de los integrantes de The Beatles), Meg Ryan (actriz), Gillian Lynne (coreógrafa), Bob Dylan (músico) y Paulo Coelho (escritor), entre otros.
Porque sus historias tienen algo importante que enseñarnos sobre la naturaleza de la capacidad humana y de la realización personal.
No son cuentos de hadas. Son historias fascinantes de personas que tuvieron una vida complicada y llena de retos. Que sufrieron fracasos y celebraron éxitos.
“Historias reales como estas pueden transmitirnos la necesidad de pensar de forma diferente en nosotros mismos y en lo que estamos haciendo con nuestra vida, en cómo estamos educando a nuestros hijos y cómo gestionamos nuestros intereses colectivos”, asegura.
El autor cree que es imprescindible que cada uno de nosotros encuentre su propio Elemento, para sentirnos más realizados y porque, a medida que el mundo evoluciona, el futuro de nuestras comunidades e instituciones dependerá de ello.
“Necesitamos propagar una nueva apreciación de la importancia de cultivar el talento y comprender que este se expresa de forma diferente en cada individuo. Tenemos que crear marcos -en las escuelas, en los centros de trabajo y en los estamentos públicos- en los que cada persona se sienta inspirada para crecer creativamente. Necesitamos asegurarnos de que todas las personas tienen la oportunidad de hacer lo necesario para descubrir el Elemento por sí mismas y a su modo”, concluye.
Te recomendamos leer el libro completo y ver su charla TED “Las escuelas matan la creatividad”, donde plantea de manera entretenida y conmovedora la necesidad de crear un sistema educativo que nutra (y no mate) la creatividad.